Asociación de ayuda al televidente, por favor
Hace un par de días la televisión volvía a temblar de miedo ante Mercedes Milá y su circo. Está vez, para rizar el rizo, pusieron a un triangulo amoroso que prometía audiencia, pero gracias a dios el tiro les salió por la culata y una de las componentes se largó nada más ver el percal. Les está bien, muy bien, por listos.
Hoy todavía tiemblo más. En esta ocasión se junta un ser odioso de por si, Terelu; una cadena que no acierta ni por casualidad, Antena 3; unos pseudofamosos de pacotilla y una granja con sus animalitos y sus cosas de granja ubicada en mi pueblo natal.
Como decía mi admirado Groucho, “La televisión promueve la cultura. Cuando veo lo que dan la apago y me pongo a leer un buen libro”.