Preguntas de una mente enferma
¿Por qué cuando me amenazan, amigo o enemigo, para una chorrada (véase link) o algo importante, me entran unas ganas tremendas de provocar eso tan grave que destruirá mi vida por entero?
¿Por qué mucha gente se mira en el espejo para ponerse el desodorante? Qué pasa, no son capaces de dar con su sobaco sin ayuda?
¿Por qué el Gran Wyoming siempre se preguntaba cuanto eran 300 dragmas?
¿Por qué la frase “Yo no soy racista, pero...” me da tanto miedo? Cómo puede ser que la escuche tanto últimamente?
¿Alguien me quiere acompañar al festival de cortometrajes que hacen esta semana en el pueblo?
¿Por qué me da tantísima pereza escribir últimamente? Es el calor? soy yo?
¿Quién se lee los manuales de instrucciones? Algún voluntario para leerse el de mi cámara nueva y explicármelo después (no se vale empollar, hay que entenderlo)?
¿Por qué nunca he sido capaz de diferenciar los “por que”, “porque”, por qué” y “porqué”? De verdad que no podría ser más fácil?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario