22/3/04

El mundo es un pañuelo
Topicazo al canto, toma ya. Pero es que es verdad, para muestra un botón:
Resulta que la segunda persona portuguesa que conozco en mi vida laboral hizo el master en la misma clase y el mismo año que yo. Vaya, que fuimos compañeros de clase y alguna vez habíamos charlado. Un amigo intentó hacer algo más que hablar, pero eso ya es otra historia.
La primera vez que hablé con ella por teléfono me sonó su voz, pero como no la podía ver no fui capaz de identificar su cara. El otro día me vino a la cabeza de que me sonaba su cara, cogí el anuario del master y resulta que encima aparece en la misma página que yo (2 personas por página). Es o no es casualidad?
Ahora que nadie busque los tres pies al gato. Nuestra relación no es espacialmente idónea, más bien el contrario. Ella está en Portugal, mercado del que nuestra división está abandonando poco a poco todo interés, y tengo la orden de perder el mínimo de tiempo con ellos. El problema es que también son los más pesados, y las luchas para intentar pasar sus llamadas sin responder son interminables. “Diles que estoy reunido”, “es que ahora mismo no puedo”, “pásale con tal”… imaginaos el puteo (justificado) que llevan. En realidad es culpa de ellos. No se dan cuenta de que están a punto de perder su queso.

No hay comentarios: