22/4/04

Antes / Después
Siempre que voy a la peluquería me pasa lo mismo, una hora de espera entre revistas del corazón y Intervius. Yo se lo digo al peluquero y el tío me dice que no puede ser, que es pura casualidad que justamente ese día vaya retrasado. Total, que ayer me volvió a pasar y él, como para compensar la espera, me presionó para que probara un producto nuevo que se ve que está arrasando y todavía lo hará más.
Se trata de una cosa de estas que sirven para disimular la calvicie, en mi caso más que incipiente, para aquellos que tienen alguna especie de trauma. Son dos potecitos, en uno hay unos polvitos del color de tu cabello que te tienes que echar por encima, y en el otro un líquido que hace que estos polvitos se peguen al cabello. Debo admitir que el resultado es sorprendente. Donde había 20 pelillos parece que haya una centena, y ya te puedes acercar que no se ve la trampa, de verdad. Precio aproximado, 60€ el conjunto.
Me hizo gracia, pero ya está. Odio que me pongan pringues tipo gomina o cosas de estas en el pelo. Tengo poco pelo, lo sé, pero tanto mis solitarios cabellos como yo queremos conservar la poca dignidad que nos queda.

No hay comentarios: