Solidaridad con overdrive
El sábado se celebró en Les Basses otra edición del festival “Els Reis són Rockers”, en la que la entrada es un juguete destinado a los niños más desafortunados de Barna. Una buena causa que se acompaña con un cartel más que digno, dignísimo.
Para empezar Les Philippes, que confirmaron su asistencia en sustitución de los franceses Hyperclean. Ya les había visto antes y, aunque sonaron algo menos duros que en aquella ocasión, continúa gustándome su estilo. No entiendo como no terminan de despegar dentro de la escena independiente.
A continuación los barceloneses Ovni. De ellos se ha dicho que son los Strokes nacionales y no seré yo quien lo niegue. Tienen un directo muy contundente, una actitud increíble y unas canciones con mucho gancho. Muy aconsejable para todos aquellos aficionados a la nueva ola rockera americana.
Después sonaron Solina, un grupo Sevillano que no pintaba mucho en el festival. Como definió el maestro Fros, su música era estilo “James Bond”, así que poco espacio había para el rock. Les siguieron los ya consagrados Delorean, líderes nacionales del electrorock. A pesar de ser muy jóvenes, de “cantar” como lo hacen, de hacer música electrónica con guitarras y de la rabia que todo ellos junto produce, acabamos admirándolos como el resto de asistentes. Esto es energía señores. Que grandes, y que jóvenes.
El último grupo al que vi (después todavía tocarnos los The Movidas) y el motivo real de la asistencia fueron los británicos Piano Magic. Post rock con toques, para mi gusto, demasiado relentizados, pero con unas guitarras y unas distorsiones que te suben a las estrellas. Que envidia, lo que daría yo por poder tocar así.