The meeting
Otro post sobre el curro para el club de fans. Por cierto, si tanto os gusta puedo aconsejaros para entrar en el departamento de marketing, total, para lo que me queda a mí aquí dentro.
Pues resulta que esta compañía que va tan mal, donde no hay presupuesto para nada excepto para que los jefes se cambien el coche de empresa por un Mercedes, ahora han fichado a dos becarios. Pero de los buenos, no de aquellos que te cobraban 25.000 pelas al mes para currar más que nadie. No, estos son de categoría. Para empezar son alemanes, ganan su buen dinerito y, para terminar, los ha enchufado el nazi del director general. Siguiendo las estrictas normas de la compañía, estos tampoco pegan palo al agua. El big boss les ha encomendado una tarea tan innecesaria como estúpida: realizar un portal para los empleados españoles. Estaréis pensando que no es tan mala idea, lo que pasa es que no sabéis que esto ya existe a nivel mundial y que localmente no generamos tanto contenido, pero que a la mitad de la gente de la empresa no les da la gana de visitarlo (para que si me lo pueden pedir a mí).
Y claro, si metes a dos personas para realizar un proyecto de tal envergadura y que durará como mínimo medio año, que persona se puede responsabilizar de controlar su trabajo y de gestionar el tema? Pues lo ideal, claro está, es alguien que esté contractualmente despedido y que, como muy tarde, se irá el 31 de diciembre. Una persona completamente desmotivada que invierta más tiempo en entrevistas de trabajo o en visitar Infojobs que en sacar adelante sus responsabilidades. Una persona que se llame.... bueno, que se apode Nuncanada. Si es que peazo cerebros tenemos por aquí.
Tendríais que espiar las reuniones de preparación del proyecto por un agujerito: el director general (alias, el nazi), el becario demasiado inteligente pero currante, la becaria que casi no habla nada que no sea alemán y yo. Y todos en inglés. Muy pero que muy “originales”. Dios, que cosas me pasan.