Post Invitado: Operando by Onos
Como bien sabéis recientemente me he sometido a una operación de menisco. Esta ha sido mi primera operación, jamás hasta ahora había pasado por un quirófano. La experiencia en cuestión no es la más agradable del mundo pero ha tenido algunos aspectos pintorescos que paso a relataros.
-Los preliminares: Lo primero es hacer el ingreso, que esto es rollo hotel, pasas por recepción y te acompañan a tu habitación, solo que en lugar de acompañarte un botones es una enfermera la que hace los honores: te explica que si aquí esta la tele, que si esta es tu cama, que a tal hora te operan y te da un jabón parecido al Mistol y una esponja para que te duches, a lo cual yo le pensé: -¿Pero eso no lo hacen las enfermeras?- Luego te hacen poner una bata que la verdad te deja muy desprotegido porque a la que me sentaba se me veía todo. Acto seguido te aparece un tío que te coge y te afeita todo el cuerpo sin contemplaciones, yo pensé que como podía ser aquello si solo me tenían que operar la rodilla y se lo comenté a la enfermera la cual me contestó: -Pero si el de la depilación todavía no ha venido pasará dentro de una hora….
Acto seguido se presenta la enfermera de nuevo y te da una pastilla para que te atontes un poco. Luego el camillero te hace subir a la camilla y pone la directa hacia el quirófano.
-La operación: Cuando entré en la zona de operaciones la cosa ya cambiaba, todo era de color verde yo creía que era por la pastilla que me habían dado. Una chica muy maja me explico que ella era la anestesista y me dijo: -Mira lo primero te voy a poner es una vía, -¿Ponerme una vía? ¿Pero que pasa? ¿Qué me va a pasar un tren por encima? -pensé yo. Pues no ni tren ni nada, trozo de pedazo de cacho de aguja que me clava la tía en la mano y me enchufa una bolsa con suero. Luego, siempre con una sonrisa en los labios, me dice: -Ahora te voy a poner la anestesia- Pues va la hija de… y me clava otra aguja en la rabadilla, yo pensaba: -Esta ni anestesista ni hostias, esta es una sádica que se ha pensado que yo soy un muñeco “budú”. Al rato no me sentía las piernas (ninguna de las tres) y cuando me quise dar cuenta la operación ya había comenzado. Al lado de donde me operaban tenían puesta una tele lo cual me hizo mucha ilusión porque yo estaba un poco aburrido, la verdad es que lo que daban en el canal que tenían puesto era un poco rollazo, parecía como un documental raro o algo así y entonces decidí cambiar de canal. La que se montó, según parece que el programa ese raro era el favorito del cirujano y que si no lo tenían puesto que no operaba o algo así, ya se sabe que como son esta gente se creen que por ser médicos tiene derecho a todo. En fin que la operación seguía y yo me aburría, entonces se me ocurrió experimentar con las partes sensibles de mi cuerpo que ahora se habían convertido en insensibles. Empecé a palpar y la sensación era muy extraña, era como si aquello que tan buenos momentos me había dado, ahora no me perteneciera y entonces el cirujano me dijo:- Oye disculpa no es que me moleste lo que me estas haciendo pero mejor lo dejamos para cuando acabe la operación y nos tomamos unas copas primero y eso.
-El post operatorio: Una vez finalizada la intervención me tuvieron aparcado junto con otra gente. Yo estaba extrañamente contento y relajado al parecer por la medicación que me habían suministrado, (no hubo forma de conseguir más medicación de esa para tomármela en casa). Bueno pues no había forma de disfrutar de esa medicación por que a cada momento me molestaban unas enfermeras que tomaban la tensión y me decían que si podía mover la pierna, yo les contestaba: -Un poquito de por favor, que no veis que me acaban de operar.- Pero al parecer lo hacían para ver si se me pasaba el efecto de la anestesia. Más tarde, cuando se me despertó todo lo dormido y yo comprobé que todo estaba en su sitio y en perfecto estado, me subieron a la habitación, me hicieron mear tumbado en la cama y en un bote y tuve la peor noche de mi vida, con enfermeras que se me metían en mi habitación con extrañas intenciones, con gente que corría por los pasillos, con extraños quejidos y alaridos que venían de todas partes y cadenas que se arrastraban, bueno esto igual fue en una atracción de feria o algo así. Pero la peor experiencia, la más terrible, la más inhumana fue que me tuvieron más de 30 horas sin comer nada.
Al día siguiente para casa y un par de semanitas sin aparecer por el curro, que eso siempre es de agradecer.
P.P. (by Nunki). Onos me informa que los comentarios de la página no funcionan. A ver si lo arreglan de una vez. Aprovecho para felicitar al artista por el post.
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